ENTREVISTA Revista

Anni B Sweet

Anni B. Sweet es una de las musas más importantes del indie pop nacional. Sugerente, atractiva y dulce, pero también dura y además… Es que casi siempre te sorprende.

Coque Maya no dudó en convertirla en su «alter ego” femenino con su famoso éxito “No puedo vivir sin ti», e Iván Ferreiro o Santi Balmes es que se la rifan.

Menuda carta de presentación para una malagueña que lleva ya bastantes años triunfando silenciosamente. 

Por Teo Cardalda. Fotos cedidas por Anni B Sweet

Teo: “Pareces más jovencita por teléfono…”

Anni: «Jajaja, ostras… pues mira, voy a tener que empezar a hablar solo por teléfono. Me lo ha dicho mucha gente, ‘tienes una vocecilla que cambia mucho cuando cantas’. Yo he nacido escuchando música; la música siempre ha estado alrededor de mí, no sé si por casualidad o por qué razón, pero es así. Y siempre he estado flipando con ella.

Creo que desde que nací, la música ha sido una terapia muy necesaria para mí. La verdad es que, a pesar de que no tengo a nadie de la familia que se dedique a esto, siempre ha estado muy, muy presente en toda mi familia. La verdad es que también la sentía y la intentaba hacer mía sin muchas pretensiones, sobre todo por algo que te voy a contar ahora y que seguro te va a hacer mucha gracia.

Yo creía que la gente nacía siendo músico o artista, yo creía que Michael Jackson había nacido así… jajajajaja (descojono general), yo pensaba que John Lennon había nacido siendo John Lennon y entonces, como yo nací siendo una chica de Málaga, pensaba que podía gustarme muchísimo la música, pero que nunca lo conseguiría. Yo nunca sería artista. Y cuando nací, no nací artista, y entonces ya sabía que nunca en la vida pertenecería al mundo soñado de la música. Yo pensaba que la gente a la que yo seguía había nacido así.

T: «Bueno… me estoy descojonando… jajaja… yo también pensaba que las latas de conserva salían así del mar… qué maravilla de inocencia.»

Anni: «Yo nunca fui consciente de que me estaba preparando y tampoco de que al final iba a conseguir caminar por donde quería y por donde había soñado. Era un hobby. 

Pero pasa el tiempo y me voy a Madrid a la Universidad y, curiosamente, cada vez estoy más rodeada de gente que hace música, de lugares con música… y no paro nunca ni de tocar la guitarra ni de escribir. Me fui a Madrid a estudiar Arquitectura y al final tuve que dejarlo en tercer curso. 

Tenía unos amigos que iban a tocar a diferentes sitios cada fin de semana y me invitaban siempre a cantar con ellos, yo realmente me moría de vergüenza, pero en el fondo me encantaba y me sentía muy realizada… ¡joder! ¡Ahí empieza todo, me hago un MySpace, no sé si te acuerdas, era de las primeras plataformas que había para mostrar al público lo que hacías, y yo me creé mi espacio y mis demos ahí… la cosa fue tan bien que empecé a tener muchos seguidores y mucha gente me escribía… fue todo muy rápido, de repente contactaron conmigo desde Subterfuge y me propusieron un contrato discográfico… y yo, de repente, que nunca me había planteado que podía llegar esto… aluciné… iba a ser la artista que no había nacido artista… jajajaja. Pero aun manteniendo, a pesar de todo, que con este paso que daría nunca iba a pasar nada. Pero funcionó… increíblemente funcionó… ¡Dios! Y empecé a tener muchos conciertos… En ese momento es cuando le digo a mi padre, ‘Papá, tengo que dejar arquitectura o no me dedico a esto’. ‘Inténtalo… y si no funciona, vuelves a la carrera el año próximo’. Y nunca volví…

T: ‘Siempre estamos a tiempo de acabar la carrera… yo dejé filología inglesa en tercero cuando reventó lo de Golpes Bajos.’

Anni: ‘De todas maneras, también te digo que ahora, después de algunos años, me doy cuenta de que la arquitectura no era lo mío… hubiese preferido estudiar Filosofía. Yo creo que yo empiezo a repuntar fuerte en el momento en el que lo indie empieza un poco a terminarse, música alternativa; a veces, lo del indie me confunde un poco. Yo siempre tuve el indie como algo arriesgado, hacer cosas sorprendentes, diferentes y cosas que te sorprendan a ti y a quienes las escuchan. Estaban Vetusta, Sidonie, Lori Meyers. 

Si tú coges a grupos de los 80 y los colocas en la época actual, esos grupos, como el tuyo, estarían mucho más cerca de la música alternativa que de la música más comercial; nunca estarían cerca de gente como Aitana, Bisbal, Orozco o Pablo Alborán, es así. 

Creo que hay demasiado monopolio hoy en día y que al final, a pesar de haber conseguido ser artista como nunca soñé de serlo, el panorama musical español ahora mismo no es como yo imaginaba.»